miércoles, 31 de julio de 2013

El pequeño centrocampista diferente: Gianfranco Zola

El 5 de Julio de 1966 nacía en Oliena (Cerdeña) Gianfranco Zola. Este menudo centrocampista desarrollaría su carrera futbolística en medio del estilo italiano por excelencia, el “catenaccio”. El de Oliena rompió los modelos de la época con un juego creativo y talentoso, el cual le convertía en el timón de los equipos en los que militó. Jugo en grandes equipos como el Napoli, el Parma campeón de la UEFA en 1995 o en el emergente Chelsea. 
Zola comenzó  a deslumbrar con su fútbol en lo más profundo del “calcio” italiano. Primero en el modesto Nourese, el cual militaba en la cuarta división italiana y más tarde en el Sassari Torres. En el Nourese jugó un total de 31 partidos y anotó 10 goles y en el Sassari Torres consiguió 21 goles en 88 partidos jugados.
El gran jugador de Oliena deslumbró a todo el fútbol italiano desde las categorías inferiores. Muchos ojeadores acudieron a los partidos del Sassari Torres interesados por la nueva perla italiana. Hasta que Luciano Moggi, director deportivo del Napoli, lo fichó en el verano de 1989. La presión y el riesgo del fichaje fueron muy altos. Pasó de jugar en cuarta división a jugar en la Serie A. Pero la calidad, talento y visión de juego refrendaron el fichaje y, junto a Diego Armando Maradona, conquistó el “Scudetto” en 1990.
El “Scudetto” conseguido y la posterior victoria en la Supercopa de Italia en 1991, le valió para ser convocado por primera vez con la “azzurra” de la mano de Arrigo Sacchi. Sin embargo, toda su carrera en el Napoli se truncó con la crisis financiera y deportiva del conjunto celeste. Esta situación obligó a la directiva a traspasar al de Oliena al Parma en 1993.
El Parma pasaba por un momento dulce en esos momentos y, de la mano de Zola, conseguiría grandes éxitos. La contratación de Zola apuntaló al club “azzurroamarello”, donde ya residían jugadores de la calidad de Dino Baggio, Thomas Brolin, Néstor Sensini o el “Tino Asprilla.  Junto con estos jugadores el Ennio Tardini vivió los años más dorados de su historia. Zola consiguió en el Parma la Supercopa de Europa de 1993 y la UEFA de 1995. Fue en esta etapa de su carrera futbolística donde Zola se ganó un gran prestigio internacional, siendo pretendido por grandes clubes de Europa. La falta de entendimiento y la incomodidad en el sistema del joven entrenador, Carlo Ancelotti, precipitaron la salida del crack italiano. Zola puso rumbo a su primera aventura fuera del país transalpino, puso rumbo a Londres.
 Zola-Parma
Gianfranco Zola fichó por un Chelsea con ganas de crecer a base de talonario. Buscaba plantar cara a los grandes de Inglaterra como el United o Liverpool. En el vestuario “blue” coincidió con jugadores como Roberto Di Matteo,  Franck Leboeuf, Gianluca Vialli, George Weah, Didier Deschamps, Gudjohnsen o Hasselbaink. En el club londinense consiguió anotar 80 goles en 312 partidos, con momento mágicos como el gol a Peter Schmeichel o su “Hat-trick” ante el Derby Country. Con el equipo londinense Zola conquistó títulos importantes como la FA Cup o la Supercopa de Europa.
 Gianfranco Zola
La llegada de Claudio Ranieri al banquillo de Stamford Bridge frenó su trayectoria en el Chelsea. Ranieri decidió limpiar el vestuario de jugadores veteranos. Se marcharon jugadores como Gustavo Poyet o Frank Loboeuf y Zola adquirió un rol secundario en el equipo. Ante esta nueva situación de conflicto con un entrenador italiano, Zola se marchó del club en 2003, siendo elegido por la afición como uno de los mejores jugadores de la historia del club. El de Oliena desembarcó de nuevo en Italia. Fue el Cagliari el equipo que disfruto de los últimos destellos de calidad del crack italiano.
Fue uno de los grandes artífices en el ascenso del club a la Serie A. A la temporada siguiente decidió colgar las botas, en 2005. Su marcha significó el adiós a un futbolista diferente que se alejaba de los estereotipos del “catenaccio” y que deslumbró al mundo con su talento y calidad. Un jugador que mostro el nuevo camino que debía seguir el fútbol italiano, apostar por los mejores y darles libertad para crea magia.
 gianfranco-zola cagliari
Con la “azzurra” solo pudo jugar el Mundial de EE.UU. 1994, donde Italia quedó subcampeona tras perder en la tanda de penaltis de la final ante Brasil. Zola anotó 7 goles en 35 partidos con la selección. A pesar del buen jugo mostrado en el Chelsea, no fue convocado para jugar el Mundial de Francia 1998. Sí jugó la Eurocopa de 1996 que se disputó en Inglaterra.   Aquí un enlace para poder ver las mejores acciones de este genuino centrocampista italiano en su etapa en el Chelsea: http://www.youtube.com/watch?v=b25MZuCzK1U
¿Cómo jugaba?
Zola siempre destacó por su gran visión de juego con el balón, por la conducción de este y por su gran capacidad goleadora gracias a su llegada desde la segunda línea. Una de sus grandes características era su fuerte tren inferior. Gracias a él conseguía realizar rápidos quiebros y giros para librarse de sus rivales. Jugaba casi siempre en tres cuartos de campo y en muchas ocasiones caía a banda para realizar jugadas de extremo. Se mantenía en continuo movimiento y generaba espacios gracias a las grandes diagonales que trazaba. Su gran característica era el golpeo de balón con la derecha, dominando casi cualquier registro de golpeo.
Christian Sánchez de la Blanca Portillo | @delablanca10

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