De Laurentiis eligió a Rafa Benítez como sucesor de Mazzarri. Con el español se espera un cambio de sistema en el equipo de Nápoles. Pasaremos, casi con toda seguridad, del 3-5-2 de Mazzarri a un 4-2-3-1 de Benítez. Dos estilos muy distintos para seguir aupando al Nápoli a lo más alto de Italia y de la Uefa Champions League.
Benítez vuelve a probar suerte en Italia y, de nuevo a un equipo con muy buen recuerdo del técnico anterior. Difícil el papel de sustituir a Mazzarri. El italiano puede presumir a haber ganado una copa de Italia y de haber llevado al Nápoli a colocarse como uno de los equipos más peligrosos del Calcio. Su labor en Europa también es bastante destacable, habiendo clasificado dos veces al equipo para la Champions y, alcanzando los octavos de final en una de sus participaciones.
La llegada de Benítez hace que el estilo de juego del equipo cambie por completo. El español instaurará un 4-2-3-1 como en sus anteriores clubes. De Sanctis parece inamovible de la portería celeste. La línea defensiva estará compuesta por cuatro hombres, dos centrales y dos laterales de largo recorrido como son Maggio y el colombiano Armero. Los centrales se postulan como la gran revolución de la línea defensiva del equipo. Según varios medios italianos, los centrales celestes para la próxima temporada serían Davide Astori, que vendría del Cagliari y Martin Skrtel, que se ficharía del Liverpool.
El centro del campo estaría formado por un doble pivote y con tres hombres más adelantados como interiores o extremos. La pareja de mediocentros la formarían Behrami y, otra contratación más, Raul Meireles que no está nada contento en el Fenerbahçe y quiere marcharse. Meireles aportaría mucho oxígeno al centro del campo del Nápoli, capaz de robar balones y de llegar arriba con opciones de gol. Un “box to box” al uso.
La posición de tres cuartos de campo la formarían Hamsik, Insigne y Ramires. Hamsik volvería a actuar como enganche tras su gran final de temporada con Mazzirri como interior. Bajaría su influencia en la elaboración del juego del equipo, pero aumentaría su número de asistencias y goles. Insigne, en el caso de que continúe, será uno de los grandes activos del club. Su gran temporada y su corta edad le colocan como uno de los jugadores más interesantes para seguir del Calcio. Ramires supondría una nueva contratación. Su buena temporada con el entrenador español y la llegada de nuevos jugadores que cuestionen su titularidad podría forzar su salida del club y, Benítez le recibiría con los brazos abiertos en San Paolo.
La delantera estaría formada por un único punta. Ante la más que posible salida de Cavani, el club de Nápoles ya baraja sus posibles sustitutos. Los mejores situados son Maro Gómez y Edin Dzeko. Parece claro que el delantero alemán no seguirá en el Bayern, ya que esta temporada no ha sido titular (Mandzukic le ha arrebatado la titularidad) y la llegada de Lewandowsky parece cuestión de tiempo que se haga oficial. La opción de Mario Gómez aseguraría goles, pero no dispone de la suficiente velocidad que requieren los delanteros en los sistemas de Benítez. La contratación de Edin Dzeko parece la más viable. El delantero bosnio podría llegar formando parte de un hipotético traspaso de Cavani al City. Dzeko aportaría más movilidad y velocidad al ataque del Nápoli. No es el mismo tipo de nueve que Mario Gómez.
Quedaría así un once de garantías para mantener la segunda plaza del Calcio y para intentar superar los octavos de la Champions conseguidos en la temporada 2011-2012. Unos centrales férreos y de garantías. Unos puñales como laterales, que puedan llegar a línea de fondo y colocar el centro. Un doble pivote consistente y con robo de balón. Unos tres cuartos de campo con magia, desborde y disparo. Y una delantera con un delantero goleador y con movilidad.
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